Las compras en línea han crecido enormemente. Pero, muchas personas siguen prefiriendo poder ver y tocar las cosas que les gustaría comprar.
La pandemia de la COVID-19 ha animado a más personas a comprar cosas en línea. Pero, las compras en tiendas reales se han recuperado a medida que la situación epidémica se alivia. Y, los jóvenes están mostrando su poder adquisitivo y un número creciente de jóvenes están dispuestos y pueden pagar por sus propias preferencias y pasiones.
Es por ello que las plataformas han decidido abrir tiendas físicas en ciudades importantes de varios países del mundo, para fomentar también el comercio físico.
En estas tiendas se fusionan tanto la experiencia digital como la tradicional, los compradores pueden escanear un código para realizar un pedido y recibir los productos en su hogar.
Y para animarlos a gastar, muchas ciudades han emitido vales que se pueden utilizar para comprar estos productos y ayudar al sector a recuperarse.