Entrevista realizada al Presidente de la Cámara de Comercio Ecuador Shanghai China, Darío Regalado por el portal web Ecuador Noticias
Darío, estamos por cumplir un año desde la entrada en vigencia del Tratado de Libre Comercio con China. ¿Cómo evalúa este primer año?
Este primer año ha sido transformador. Si bien el impacto completo de un TLC se mide a largo plazo, ya empezamos a ver señales concretas: reducción de aranceles para cientos de productos, mayor dinamismo en el comercio bilateral, incremento en la demanda de asesoría para exportar y, sobre todo, un interés renovado por parte del sector productivo ecuatoriano por mirar hacia Asia. El TLC no es solo un acuerdo técnico, es una invitación a repensar nuestro modelo comercial.
¿Cuáles han sido los principales logros desde la firma del acuerdo?
Uno de los logros más significativos ha sido el avance en los protocolos fitosanitarios, que son la llave de entrada para los productos agroindustriales. Estamos a días de la firma del protocolo que permitirá a los lácteos ecuatorianos entrar al gigante asiático, lo cual marca un antes y un después para el sector. También hay progresos para el aguacate, la pitahaya, los arándanos y la carne de cerdo. China no es un mercado fácil, pero es muy claro: si cumples con los requisitos, hay espacio para crecer.
¿Qué papel ha jugado la Cámara de Comercio Ecuador – Shanghái – China en este proceso?
Nuestro rol ha sido conectar, facilitar y acompañar. Desde la Cámara hemos asesorado a miles de emprendedores, productores y empresarios en temas clave como trámites GACC, CIECN, CIFER, normativas de etiquetado y requisitos sanitarios. Además, contamos con bodegas propias en Yiwu y oficinas en Shanghái, lo que nos permite ofrecer un servicio integral, desde el origen hasta el destino. Este año también iniciamos la apertura de oficinas en Perú y otras ciudades de Ecuador para fortalecer esta red.
¿Qué importancia tiene contar con bodegas en China y con el Pabellón Ecuador?
Es fundamental. Nuestras bodegas en Yiwu permiten consolidar carga y ofrecer una logística más eficiente para quienes exportan o importan. Pero más allá de eso, estamos construyendo visibilidad. El Pabellón Ecuador, por ejemplo, es nuestra vitrina en el comercio electrónico chino. Allí posicionamos productos ecuatorianos en plataformas como JD.com o Taobao, acercándolos directamente al consumidor chino. Es una forma moderna y estratégica de competir.
¿Y del lado de las importaciones?
También ha habido un crecimiento notable. Cada mes, traemos al menos dos contenedores con mercancía de carga compartida. Gracias a herramientas como Alibox, nuestro casillero postal en China, incluso pequeños emprendedores pueden importar sin complicaciones. Hoy contamos con casi 1.000 socios activos en toda Latinoamérica, lo que demuestra que este modelo es replicable y accesible.
¿Qué mensaje les daría a los productores ecuatorianos que aún dudan de exportar a China?
Que no esperen más. China es un mercado competitivo, pero con enorme potencial. El consumidor chino valora la calidad, el origen y la trazabilidad. Ecuador tiene todo eso. Ahora, con el TLC en vigencia y con herramientas como la Cámara, los obstáculos se reducen y las oportunidades crecen. Este es el momento de proyectarse al mundo.
¿Cómo ve el futuro comercial entre Ecuador y China?
Soy muy optimista. Nos esperan años de crecimiento mutuo. El comercio con China dejará de ser unidireccional. Vamos a exportar más productos terminados, con valor agregado, y posicionar a Ecuador como un proveedor confiable. Desde la Cámara, seguiremos impulsando esta visión con alianzas, formación, y presencia activa tanto en ferias internacionales como en el comercio electrónico.